Desde Lebudit ofrecemos a todas las mujeres algunas claves para el autocuidado
Hoy queremos ofreceros una guía completa sobre la importancia del autocuidado y la salud articular en mujeres que están en la premenopausia y la menopausia. Abordaremos cambios hormonales, nutrición, actividad física, manejo del estrés, descanso y señales de alerta que requieren de la máxima atención. Nuestro objetivo es ofrecer estrategias prácticas para mantener una vida activa y saludable en esta etapa esencial.
Hoje queremos oferecer a você um guia completo sobre a importância do autocuidado e da saúde das articulações em mulheres que estão na pré-menopausa e menopausa. Abordaremos alterações hormonais, nutrição, atividade física, controle do estresse, descanso e sinais de alerta que requerem atenção máxima. Nosso objetivo é oferecer estratégias práticas para manter uma vida ativa e saudável nesta fase essencial.
Cambios hormonales y salud articular de la mujer
La premenopausia o perimenopausia es la etapa que precede a la menopausia. Durante este período, el cuerpo de la mujer comienza a experimentar cambios hormonales debido a la disminución progresiva de la producción de estrógenos y progesterona. Esta fase puede durar varios años y se caracteriza por síntomas como ciclos menstruales irregulares, sofocos y sudoraciones nocturnas, cambios de humor y episodios de irritabilidad o tristeza, alteraciones del sueño y sequedad vaginal.
Por otro lado, la menopausia es el momento en que una mujer deja de tener menstruaciones de manera permanente, indicando el final de su capacidad reproductiva. Se diagnostica oficialmente después de 12 meses consecutivos sin menstruación. La edad promedio para alcanzar la menopausia es alrededor de los 50 años, aunque puede variar. Los síntomas de la menopausia son similares a los de la premenopausia, pueden ser más intensos y además pueden aparecer problemas urinarios, como el aumento de la frecuencia urinaria y la infecciones urinarias recurrentes.
Para manejar los síntomas asociados a la premenopausia y la menopausia es necesario mantener una dieta equilibrada, hacer ejercicio físico, reducir el estrés y recurrir a ciertos complementos que pueden ayudar a mejorar el bienestar general.
Cuando los niveles de estrógenos disminuyen, el cartílago puede volverse más delgado y propenso a sufrir daños, lo que puede llevar a la aparición de dolor, rigidez e inflamación en las articulaciones, también puede afectar a la densidad ósea, aumentando el riesgo de osteopenia y osteoporosis, una condición que debilita los huesos y los hace más susceptibles a fracturas.
Nutrición esencial para la salud articular
Una alimentación equilibrada es fundamental para mantener la salud articular durante la menopausia, ya que ciertos alimentos y nutrientes pueden ayudar a reducir la inflamación, fortalecer los huesos y promover la salud del cartílago.
La vitamina D es esencial para la salud ósea, facilita la absorción del calcio y aunque puede obtenerse a través de la exposición solar, también podemos encontrarla en pescados grasos, hígado, queso, yema de huevo y alimentos enriquecidos como leche o cereales.
Los ácidos grasos omega-3, presentes en nueces, semillas, linaza y en pescados grasos como el salmón, la caballa y las sardinas, tienen propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir el dolor y la rigidez articular.
Los antioxidantes, como la vitamina C, protegen las células del daño oxidativo causado por los radicales libres, que pueden contribuir a la inflamación y el deterioro articular. Las frutas y verduras son ricas en antioxidantes.
El colágeno es una proteína que forma parte del cartílago y otros tejidos conectivos. Consumir alimentos ricos en colágeno, o complementos que lo contengan, pueden ayudar a fortalecer las articulaciones.
Y muy importante, evitar alimentos procesados, azucarados y ricos en grasas saturadas, puede ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud general. Además, mantener un peso saludable también es importante, ya que el exceso de peso puede ejercer presión adicional sobre las articulaciones.
Actividad física: clave para la movilidad y el bienestar
La actividad física regular es crucial para mantener la movilidad, fortalecer los músculos y reducir el dolor articular durante la menopausia. Una combinación de ejercicios de bajo impacto, fortalecimiento muscular y flexibilidad puede proporcionar los mayores beneficios.
Los ejercicios de bajo impacto, como caminar, nadar, montar en bicicleta y el yoga, son suaves para las articulaciones y ayudan a mantener el peso, a mejorar la circulación, reducir la rigidez y aumentar la flexibilidad.
El fortalecimiento muscular con ejercicios de fuerza es fundamental para mantener la estabilidad articular y reducir el riesgo de lesiones, como movimientos con pesas, bandas de resistencia o el propio peso corporal pueden ayudar a fortalecer los músculos que rodean las articulaciones, proporcionando mayor soporte y protección.
Los ejercicios de flexibilidad, como los estiramientos, ayudan a mejorar la amplitud de movimiento de las articulaciones, a reducir la rigidez y a mejorar la postura y el equilibrio.
Estrategias para el manejo del estrés
El estrés crónico puede intensificar el dolor y la inflamación articular. Realizar en nuestro día a día estrategias de manejo del estrés puede ayudar a mejorar la calidad de vida. Técnicas de relajación, meditación, yoga o mindfulness pueden ser muy efectivas, también pasar más tiempo en la naturaleza o simplemente dar un paseo consciente, puede tener un efecto calmante.
Priorizar el autocuidado y dedicar tiempo a actividades que realmente nos gusten es fundamental para mantener el equilibrio emocional y físico.
El descanso y el sueño: pilares del autocuidado
El descanso adecuado y el sueño reparador son esenciales para la salud articular y el bienestar general, más aún durante la menopausia. Mediante el descanso, el cuerpo se recupera y repara los tejidos dañados.
Establecer una rutina de sueño regular, acostándose y levantándose a la misma hora todos los días, crear un ambiente propicio para el sueño, que sea oscuro, tranquilo y fresco, puede ayudar a mejorar la calidad del sueño. Realizar actividades relajantes antes de dormir, como leer, tomar un baño caliente o practicar la meditación, puede ayudar a reducir el estrés y preparar el cuerpo para el descanso.
Consejos Lebudit para una vida activa y saludable
El autocuidado es fundamental para mantener una vida activa y saludable durante la transición menopáusica. Los cambios hormonales, la nutrición, el ejercicio físico, el manejo del estrés, el descanso y el sueño juegan un papel crucial en la salud articular.
Se recomienda adoptar una alimentación equilibrada y rica en nutrientes esenciales, vitamina D y Omega-3. El ejercicio físico regular, combinando ejercicios de bajo impacto, fortalecimiento muscular y flexibilidad, mantiene la movilidad y reduce el dolor articular. Nuestro Colágeno Hidrolizado Fórmula Mujer, es el aliado perfecto para nutrir nuestro cartílago y fortalecer las articulaciones al mismo tiempo que ayuda a reducir los síntomas asociados a la menopausia, como los sofocos, sudoración excesiva y cambios en el estado anímico; que también podemos mejorar con nuestro complemento Menoduo PLus y si el problema son las infecciones de orina, puedes contar con nuestro Arándano rojo con probióticos.
El manejo del estrés, el descanso adecuado con un sueño reparador son esenciales para la recuperación y reparación de los tejidos, utiliza nuestra Melatonina en gotas si te cuesta conciliar el sueño.
Y recuerda que puedes pedir también consejo a tu profesional farmacéutico para mantenerte motivada y superar los obstáculos que podrían presentarse durante la transición menopáusica, seguro que puede recomendarte los complementos B.Green adecuados para mantener una vida más activa, saludable y plena.